En Lisboa, una cabina telefónica se ha convertido en la nueva biblioteca comunitaria.
Se inauguró este pasado 23 de abril, día del libro, y fue una iniciativa del Movimiento comerciantes Avda. Guerra Junqueiro, calle de tiendas que desemboca en la Plaza de Londres, donde se encuentra esta inesperada biblioteca, y de Portugal Telecom.
La dinámica es simple y se basa en la confianza.
Llegas, abres la puerta (siempre está abierta), mirar los libros que hay, eliges uno, lo coges, apuntas en un cuaderno tu nombre y el libro que te llevas y el que dejas, la primera vez uno tuyo que cedas a la biblioteca y las demás el anterior que has cogido. Y ya está. La segunda parte queda para tu casa, el parque o el lugar donde quieras disfrutar de la lectura.
Lo devuelves cuando lo hayas terminado, no hay plazos.
Y quizá por eso, al ser cada uno mismo el último responsable, funciona tan bien. Porque desde que me enteré de su existencia he ido dos veces y siempre está ordenada, la gente aparece a devolver y coger libros y encuentras buenas cosas que llevarte a casa.
Desde que los teléfonos móviles han aparecido en nuestras vidas, cada vez encontramos menos cabinas para hacer las llamadas de emergencia, y si lo hacemos están rotas o destartaladas. Por eso esta iniciativa, sumada a otros que hacen en otros paises ( aquí os dejo algunos ejemplos) hacen que podamos reutilizar espacios y que la cultura crezca.
Me gusta mi nueva biblioteca. Ya llevo dos libros sacados, " La herencia de Esther" de Sandor Marai, y "El hombre que plantaba árboles" de Jean Giono. Mañana voy devolver este último y a ver que me encuentro ;)
Qué curioso... me cuesta creer que todavía existan personas civilizadas que no roben ni rompan ni ensucien cuando nadie las vigila. ¿Será porque son lectores?
ResponderEliminarEsa cabina me recuerda a las de Londres, ¿son iguales en Portugal y en Inglaterra? ¿O es en plan decorativo?
Si, quizá sea porque son lectores, también lo pensé.
EliminarY si, las portuguesas antiguas también debían ser así. o eso me dijeron, porque las modernas carecían de encantos ;)